Las personas que impulsamos esta plataforma practicareflexiva.pro somos profesionales docentes que compartimos una misma visión tanto del acto educativo central (la interacción alumno-profesor/a), como de la formación de los profesionales docentes. Hemos puesto en marcha esta plataforma precisamente porque queremos también compartir estas mismas ideas con otros profesionales docentes.

Con el antecedente de la reflexividad y del pensamiento reflexivo, el aprendizaje y la formación profesional docente (inicial o continuada) basada en la reflexión sistemática sobre la práctica es una metodología que emerge con fuerza en distintos ámbitos profesionales y no sólo en el campo de la enseñanza. Sin embargo, en nuestro ámbito es especialmente importante dado que se ha revelado como una herramienta de gran potencial transformador de la práctica y de mejora de la actividad profesional. De hecho, lo que se busca, en definitiva, es mejorar cualitativamente la intervención docente y el aprendizaje de los alumnos (en todos los niveles: infantil, primaria, secundaria, formación profesional o universidad). Nuestra hipótesis de partida es que un profesorado que mejore continuamente su práctica será capaz de mejorar también el aprendizaje de su alumnado.

Por eso, qienes impulsamos esta plataforma tenemos la pretensión (ambiciosa) que nuestra propuesta puede ayudar a mejorar también la educación, en muchos países. Creemos, modestamente, que la contribución de la práctica reflexiva, en la formación inicial así como en la permanente, puede ser un elemento importante para aumentar la calidad de la educación de nuestros niños y jóvenes.

A partir de este punto de arranque, queremos hacer público que nos gustaría compartir los objetivos y las metas de mejora con todas aquellas personas que puedan sentirse atraídas por la convicción de que la formación del profesorado es una pieza clave en cualquier sistema educativo y que una mejora de esta formación es posible si va acompañada del rigor metodológico que conlleva la práctica reflexiva.

Por lo tanto, hay que advertir desde el inicio  que formarse o aprender de acuerdo con los principios que postulamos no es una actividad fácil, para llenar el expediente o simplemente para dar una pátina superficial en la formación del profesorado. Aprender nuevas formas profesionales de intervenir y de gestionar el aula, romper visiones y estereotipos sobre el alumnado, cambiar modelos mentales y transformar el pensamiento (a menudo negativo) del profesorado sobre la enseñanza y el aprendizaje no son tareas fáciles ni posibles de ser acometidas sin una notable voluntad y constancia de cambio y una notable dosis de humildad y deseos de aprender y mejorar continuamente.

Por ello, a la vez que hacemos explícita nuestra voluntad de dar a conocer una metodología que ya ha demostrado su capacidad transformadora, también somos muy conscientes de que la formación de los profesionales docentes (como de otros campos) no es una formación que se pueda enfocar ni con recetas simplificadoras ni con grandes teorías alejadas de la práctica cotidiana. Pero, y este es el punto central y relevante, no se puede hacer sin el concurso de los propios profesionales, que conocen, al menos intuitivamente- qué pueden hacer para encontrar soluciones a los problemas que se les plantean en el aula cada día.

Los interesados encontrarán en el espacio de esta plataforma fundamentos teóricos, experiencias, instrumentos, artículos de divulgación y referencias bibliográficas para ampliar su visión de la práctica reflexiva. Pero, sobre todo, queremos que puedan encontrar un punto de encuentro y de intercambio que invita a aprender, pero también a aportar (reflexiones, experiencias, propuestas teóricas y prácticas), para construir juntos una verdadera comunidad de aprendizaje.

Esta es nuestro objetivo final: constituir el embrión de una gran comunidad de aprendizaje profesional, que ayude a los docentes (de todos niveles; expertos y aprendices) a reflexionar y a mejorar su práctica cotidiana de enseñanza y aprendizaje. Y a la vez les permita sentirse acompañados de otras personas que, como cada uno de nosotros, también se esfuerzan por mejorar su práctica profesional.

El equipo impulsor.

Àngel Alsina, Joan Badia, Àngels Domingo, Olga Esteve, M. Victoria Gómez y Jordi Riera.